El ahorro energético impuesto por el Gobierno no ha hecho mella en la usanza maracaibera, por ejemplo, pues los bombillos tradicionales fueron sustituidos por aquellos que economizan electricidad.
El encendido de las 35 cuadras de luces en el Zulia, en la avenida Bella Vista y del Angelito de Amparo, integradas por 1.322 bombillos, son la señal del inicio de la Navidad en Maracaibo.
"No pensé que fueran a encender el angelito por el asunto del racionamiento y las lluvias. Mis nietos me preguntaban todos los días que si faltaba mucho para que lo pudieran ver. Desde el día en que se iluminó, la Navidad se hizo presente en ellos y en mi hogar, y sé que en el de muchos marabinos", dijo José Moreno, habitante del sector Amparo.
El Angelito de Amparo, situado en la torre de la sede de Corpoelec, Teolindo Álvarez, es una estructura tridimensional de 120 metros de altura que puede ser observada desde los cuatro puntos cardinales de la capital zuliana.
Su creación fue el resultado de un concurso efectuado en 1971 en el que la entonces Edelca pedía un diseño de Navidad para la torre de Amparo.
En principio, fue construida en estructura de una sola cara que fue sustituida por otra tridimensional en 1974. El ángel funciona con bombillos ahorradores.
Sólo en tres ocasiones la luminosa figura ha sido encendido fuera de la fecha acostumbrada: durante la visita realizada por el papa Juan Pablo II en 1996; al momento de la muerte del pontífice en 2005 y por el evento deportivo Copa América en 2007.
Mantener la tradición. "Es bueno que hayan hecho el encendido de Bella Vista y continúen con las tradiciones de Navidad, pues siempre es bueno mantener la alegría y las sonrisas de esta época a pesar de las adversidades", dijo Luis Martínez, chofer de la línea de transporte de Bella Vista, al referirse a las recientes lluvias que han dejado a miles de refugiados en la ciudad y el estado.
El encendido de las 35 cuadras de esa avenida se realizó por primera vez en 1996 cuando Manuel Rosales, que era alcalde de Maracaibo, tomó la idea de una urbanización petrolera de la Costa Oriental del Lago en la que sus residentes, oriundos de Estados Unidos, adornaban las casas con luces en diciembre.
Desde ese entonces, todos los años a partir de la primera semana de noviembre se encienden las luminarias en la transitada avenida Bella Vista, que se acompañan con adornos navideños de gran escala que hacen alusión al pesebre, la Navidad y también a personajes como los de Disney.
Fuente: El Nacional
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