Como dice el adagio popular “No hay mal que dure 100 años ni cuerpo que lo resista” y con esa premisa las Águilas del Zulia blanquearon 11×0 a los Caribes de Anzoátegui para acabar así con su peor racha negativa en la postemporada.
La fórmula fue una soberbia actuación del diestro norteamericano Dwayne Pollok sumada al festival de batazos por parte de la ofensiva naranja.
Pollok estuvo por espacio de 7.0 entradas en donde no permitió mayores libertades a la toletería a oriental que solo le conectó cinco inatrapables. El diestro estadounidense también ponchó a cinco y no concedió boleto alguno.
La de hoy fue la noche de los maderos alados. Un total de 18 inatrapables fue el total que produjo la ofensiva zuliana, que esta vez sí estuvo oportuna a la hora de mover los corredores en bases.
Las rayitas llegaron a partir del segundo capítulo y la producción no paró hasta la parte baja del quinto episodio, incluido un rally de seis anotaciones en el tercer inning.
Por Zulia el más productivo fue el mexicano Jesse Gutiérrez al ligar de 3-3 con un remolque y par de anotadas. Francisco Plasencia también brilló al irse de 5-2 con par de fletadas.
Ahora el récord alado está en 3-7 abandonado el último lugar y ponerse a 4.5 juegos de los punteros Leones del Caracas, manteniendo opciones matemáticas de clasificar.
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